5 Barreras al Comercio Internacional

5 Barreras al Comercio Internacional

29 de agosto de 2019


Según Eurostat, una Dirección General de la Comisión Europea responsable de la elaboración y publicación de datos estadísticos a escala comunitaria, el principal obstáculo para el desarrollo del comercio internacional en la Comunidad Europea es la lengua y la cultura. Luego vienen los derechos de aduana, las incertidumbres sobre las normas internacionales y, por último, las limitaciones legales y administrativas.

Idioma y cultura

Si hay un obstáculo importante para la expansión del comercio entre países extranjeros, es la barrera lingüística y cultural que no parece cambiar. En el Reino Unido, este es el principal obstáculo para el 14,5% de las empresas (13,4% en Portugal, 12,3% en Eslovenia y 11% en Irlanda). Por otra parte, la cultura y el idioma no son en absoluto un obstáculo para el comercio internacional en Noruega (5,5% de las empresas) y Alemania (4,8%).

Comparando sus datos con el nivel de multilingüismo de los países europeos, se observa que los países en los que la lengua y la cultura no son un obstáculo para el comercio internacional son también aquellos en los que la población está más abierta a las lenguas extranjeras. Por ejemplo, en Noruega, el 92,1% de la población habla al menos una lengua extranjera y en Alemania, el 56% de la población es capaz de mantener una conversación en inglés. En cambio, en el Reino Unido, sólo el 34,6% de la población habla una lengua extranjera.

Aunque el inglés parece ser el idioma principal para los negocios, no es suficiente. De hecho, se ha demostrado que, aunque el uso de una lengua común es necesario para el desarrollo de una actividad en un país extranjero, el dominio de la lengua oficial del país en el que se encuentra es esencial para la sostenibilidad de estas actividades. Lo ideal es aprender a hablar idiomas extranjeros, seguir cursos de idiomas, sumergirse… Pero al menos conocer algunas palabras clave y fórmulas amables.

Además, muchas empresas no han logrado desarrollar sus negocios debido a la falta de conocimiento de la cultura del país en el que están ubicadas. Un modelo de negocio que funcione en Europa no será necesariamente aplicable en un país sudamericano donde el idioma, las costumbres y los hábitos son muy diferentes.

La cultura es un elemento esencial en la vida de las personas. Cualquier empresario que desee desarrollar su negocio en el extranjero debe conocer los hábitos y costumbres de sus interlocutores: la forma de comportarse, la comunicación no verbal o las especificidades culturales varían enormemente de un país a otro, y el mismo acto tendrá un significado diferente. Tenga cuidado de no cometer errores: por ejemplo, en algunas partes del mundo, un pequeño regalo puede interpretarse como un soborno, mientras que en otros países es una parte común, si no necesaria, de las negociaciones comerciales.

Por lo tanto, nunca se insistirá lo suficiente en la importancia del aprendizaje de lenguas extranjeras. Más allá del “simple” multilingüismo, el interés por las diferentes culturas que constituyen la riqueza de nuestro mundo permitirá un mejor desarrollo de los negocios comerciales y, sobre todo, un enriquecimiento personal inestimable para el alumno. Aunque sea difícil hablar todos los idiomas con fluidez y conocer todas las culturas, lo importante es interesarse: hablar algunas palabras, aprender hábitos, especialidades culinarias, comunicación no verbal….

Derechos de aduana

El segundo obstáculo importante para el desarrollo del comercio internacional en Europa son los derechos de aduana, que gravan las mercancías importadas. Una proporción significativa de empresas de Suecia, Alemania, Finlandia y Eslovenia consideran que estos impuestos constituyen un obstáculo al comercio internacional. Por otra parte, pocos empresarios italianos y portugueses ven esto como una barrera.

Cabe señalar que la Unión Aduanera de la UE, creada en 1968, armoniza los derechos de aduana sobre las mercancías originarias de fuera de la UE y no aplica internamente ningún derecho de aduana.

Fiscalidad

Cuando hablamos de comercio internacional, a menudo hablamos de la carga fiscal de las empresas, de los impuestos que tienen que pagar por su producción, por los salarios pagados……

Este impuesto, que varía de un país a otro, es un obstáculo importante al comercio internacional para muchas empresas en Suecia, Dinamarca, Finlandia e Italia. En Alemania y Portugal, la fiscalidad no se considera  como un obstáculo.

Dentro de la UE, Rumania es una fuente importante de importaciones. Algunos de los principales fabricantes de automóviles del mundo han localizado allí parte de su producción, debido principalmente a los bajos costes de mano de obra. En cuanto a la fiscalidad, Rumanía ocupa el puesto 49 en el ranking de PwC Paying Taxes 2019, que mide la facilidad fiscal en 190 economías de todo el mundo (https://www.pwc.com/gx/en/services/tax/publications/paying-taxes-2019.html). Ha subido 8 puestos en este ranking entre 2018 y 2019. La tasa impositiva total en este país es del 40% de las ganancias

Fuera de la UE, China y Rusia son importantes en el mercado europeo. Así, el 22% de los productos exportados de China están destinados a Europa. En Rusia, es del 53%.

Estándares internacionales

El número de normas y el control del cumplimiento son criterios que pueden obstaculizar el desarrollo internacional de las empresas. Al menos este es el sentimiento del 11,1% de las empresas en Noruega, el 11% en Suecia, el 10,8% en los Países Bajos y el 10,7% en Finlandia. Por el contrario, rara vez constituye una barrera para las empresas de Italia y el Reino Unido.

La norma ISO9001 define los requisitos para la implementación de un sistema de control de calidad para productos o servicios. Internacional y generalista, es adoptado por muchas empresas para certificar la calidad de su producción. Así, la norma ISO9001 representa el 40,8% de los certificados emitidos en Europa, el 45,5% en Asia… pero sólo el 4% en Norteamérica.